Los buenos momentos de los equipos se basan en muchos aspectos y uno de esos pasa por el trabajo transparente, como también silencioso, de muchas personas, más allá de lo realizado por los jugadores.
Luego de consagrarse en la Liga Departamental 2017, el «Rojinegro» se encuentra disputando la Copa de Clubes B de OFI y lo ha hecho de muy buena manera, pese a caer el pasado fin de semana ante Estrella del Sur. El próximo domingo comenzará un nuevo andar en el certamen, recibiendo de local en el Estadio Martínez Monegal a Atlético Rosario por la primera fecha del grupo de la nueva fase.
Darío Álvarez es oriundo de Progreso, aunque reside en Juanicó hace 20 años por un tema más que lógico: «Yo trabajé desde muy joven en el establecimiento. Ya casado, se da la posibilidad de integrar una vivienda de Mevir, pero para acceder a la misma debía presentar un domicilio en el pueblo. Tuve la suerte de que me la brinde mismo el establecimiento, y posteriormente obtuve mi casa»… Comenzó contando el popular «Chino», equipier del club.
No era fácil la cosa tiempo atrás y desde los 13 años tuvo que salirle al trabajo: «Mi primera experiencia laboral fue en una panadería de Las Piedras»… Contó que le encantaba estudiar y era bueno, pero por ciertos motivos se hacía difícil: «En aquella época era todo caro y no contábamos con todas las facilidades que hay ahora. Ya de grande hice un curso de electricidad, pero me hubiese gustado especializarme en mecánico tornero, en aquellos tiempos erar el furor».
Siempre estuvo ligado al fútbol, desde su infancia: «En el baby, vestí la camiseta de Deportivo El Colorado y La Placita, actualmente el Club Cerrillos. Luego llegué a los cadetes de Juanicó, aunque por temas laborales no pude seguir. Segovia, quien era el entrenaodor, era muy estricto, por lo que tuve que dejar. Realmente no me daban los tiempos»… Álvarez volvió a la institución de forma oficial en 2011, pero cumpliendo otras tareas, siempre tan importantes.
«Yo siempre venía a los entrenamientos, y un día me ofrecieron trabajar para el club. Acepté. Enseguida dije que si, me gusta estar dentro de la institución»… De Progreso, pero con corazón «Rojinegro»: «Desde que mis hijos comenzaron a jugar en la institución me hice hincha»… «Difícil decirlo yo, pero soy muy sencillo y no problemático. Nunca tuve un problemas con nadie»… contó sobre su personalidad.
Cuando habla de sus hijos, César, José Ignacio, Bruno y Mauro, siempre una lagrima aparece y la emoción está presente: «Ellos son todo todo para mi. Estoy sólo con los cuatro desde que el más chico tiene tres años, he vivido para ellos. Fue complicado, pero hoy tengo la recompensa de ver lo que son. Son tremendos pibes. Yo no soy de salir, mi distracción pasa por venir a la cancha».
EL PING-PONG DEL CHINO
- Con quien siempre te gustó venir a tomar un mate antes de los entrenamientos?
«En un antiguo plantel, «Pitingo» Camargo. Un jugador mayor, con experiencia y muy buena gente. Conversábamos mucho, tal vez por la edad de ambos».
- Un plantel?
«Fueron muchos y con todos vivimos cosas lindas, pero el de 2012 fue especial. Jugaban Fernando Garrasino, el «Canario» Bonilla, «Pitingo», Monserrat, Peraza, Moreno y el «Pepe», mi hijo, entre otros. Fueron campeones de la Liga Departamental».
- Un partido?
«También, en el año 2012, una final en el Estadio Martínez Monegal ante Santa Lucía. Lo llevo más para mis raíces; En el día de su cumpleaños, el «Pepe» marcó un golazo. En ambos cotejos definitorios convirtió. Fue muy especial».
- Un jugador mimoso?
«No se si llamarlo mimoso, pero el «Coco» Palomeque siempre está pidiendo una cosa o la otra…. jaja».
- Quién siempre viene de buen humor y levanta a todos?
«Emiliano «Mimí» Núñez. Lo conozco únicamente de la cancha, pero siempre lo ves bien».
- Quién siempre está con un humor difícil de llevar?
«Jonathan Palomeque… Es complicado el «coco» jaja, pero muy muy buena gente. Lo conozco desde niño».
- Un gol?
«Te podría decir el de «Pepe», que conté anteriormente, o ante Cerrillos aquí en el complejo porque era el día del padre. Te dije que era muy de mis hijos jaja. Otro también que me llegó fue el de Juan Manuel Lazbal el año pasado ante Libertad, los dos en realidad».
- Un técnico?
«Alejandro Barón. El primer campeonato que estuve él era el DT, muy buena gente. Nos conocíamos de muchos años por coincidir en la inauguración de la cancha de La Amistad, en el Colorado. Después de mucho tiempo nos volvimos a encontrar, de hecho nos acordábamos de lo dicho».
- Qué jugador que te ha sorprendido?
«En la actualidad, Jairo Baladón. Cuenta con muchas virtudes dentro del campo de juego; Muchas ganas, rápido, hábil… Después, «Pepe» mostró un buen potencial y terminó jugando en el fútbol profesional. Se le veían las condiciones y siempre me lo decían, hoy en Atenas de San Carlos».
- Una anécdota?
«Sin dudas lo que sucedió con el «juanico», jaja. Increíble lo que pasó, con minuto de silencio y demás. Recuerdo que el sábado, antes de darse la noticia, lo encontré en la cancha y el estaba pronto para irse a internar, ya que se iba a realizar una operación. Justo el «Rojinegro» jugaba la final, estaba triste, pero se había comprado una radio. Resulta que cuando me la fue a mostrar, la misma no tenía pilas, y el juraba que las había comprado. El domingo de mañana vine a la cancha y cuando me iba, en la entrada, las pilas en el piso».
- Un preferido?
«Acá no puedo hablar de individualidades, para mi son todos iguales y con cada uno tengo el mismo trato. Los disfruto».
Martín Abreu