Wanderers se quedó con el clásico del río en el Estadio Martínez Monegal con una tarde para el recuerdo de «Terrible».
Iván Pailós nació el 3 de octubre de 1981 en la capital de nuestro país, Montevideo. Se encuentra casado y es papá de Erik. Como pasa habitualmente en el interior, además de llenarse la boca de gol cada domingo, se desempeña laboralmente en un laboratorio donde se encarga del reparto de medicación
El máximo escenario de nuestro departamento fue testigo de un duelo que dividió, por 90 minutos, a Santa Lucía. La tarde fue «Bohemia» de la mano del delantero de la capital, quien marcó un hat-trick. Abrió la cuenta de cabeza por encima del golero, el segundo fue un golazo de tiro libre y por último definió cruzado mandando la pelota al fondo de la red.
Fueron muchas las camisetas que vistió el «Terrible» en su carrera profesional. En Uruguay; Fénix, Sud América, Juventud de Las Piedras y Huracán, entre otros. En el plano internacional defendió al Eibar (España), Deportivo Malacateco (Guatemala), Cartaginés (Costa Rica) y Central Córdoba (Argentina).
Wanderers sintió la ausencia, pero también siente el regreso del goleador al equipo de Parolín. No fue bueno su paso por el fútbol «Maragato», pero ya lleva ocho goles y se lo espera ver con la selección nuevamente. Conocé más de Iván Pailós, el jugador azulgrana de la séptima fecha del Campeonato Clausura.
¿Se dio todo lo que soñaste en el clásico?
«Creo que se dio todo lo que el cuerpo técnico armó para este importante encuentro y logramos lo que la gente soñó. Yo sólo juego para el equipo, mi trabajo es hacer goles.
¿Sin estar peleando el título y en el final de la temporada, cuanto sirve este triunfo?
«A mi entender sirve y de mucho, porque es el partido que todos queremos ganar. De los demás nadie se acuerda, pero te aseguro que de este clásico si.
¿De qué se lamenta hoy Wanderers?
«Nos lamentamos de no haber conseguido puntos en partidos claves que teníamos que ganar y sabemos que con este plantel podíamos ser campeones, pero esto es así y no se dio».
¿Es un hecho que vas a jugar en el «Bohemio» el próximo año o buscarás nuevos destinos?
«Eso el destinó lo dirá… Por el momento estoy en Wanderers y no pienso en el siguiente año».
¿Vas por el bi-campeonato con la selección o aún no sabes de tu futuro?
«Sería muy lindo para mi, como para todo Canelones, logar el título del interior por segunda vez consecutiva con la selección, aunque aún no se si voy a estar».
¿En qué equipo te hubiese gustado jugar?
«Sin dudas que en el club del cual soy hincha. No se me dio ya que es uno de los grandes del fútbol uruguayo…»
¿Si no es arriba, dónde podrías jugar y qué cualidades tenés?
«Un técnico me pidió una vez que juegue de cinco y lo hice bastante bien. Igualmente, mi posición es de la mitad de la cancha hacia adelante».
¿Cuál fue el defensa que más te complicó?
«Sin dudas que el argentino, Rolando Schiavi, cuando yo defendía la camiseta del Eibar de España. Fue un duelo constante entre ambos».
¿Con qué delantero te gustaría volver a jugar?
«Claro está que con Joaquín Irazoqui. Es un compañero y un amigo que me dio el fútbol, con el cual nos entendemos de muy buena manera».
¿Cuando te retires, te gustaría seguir vinculado al fútbol de qué manera?
«Claro que si. Estoy pensando en comenzar el año que viene el curso de entrenador y cuando decida dejar de jugar ya tener el título para poder dirigir».
Si bien no hablamos de una buena temporada de Wanderers, la vuelta de Pailos le cambió la cara al conjunto «Bohemio», que despedirá el año el próximo domingo en el Parque Briano ante Darling
Martín Abreu