Canelones recibirá este domingo a Tacuarembó en el Estadio Martínez Monegal desde las 20:00 horas por la final revancha de la Copa Nacional de Selecciones.
Luego de cinco meses de trabajo, de entrenamientos y de la disputa del certamen, llegó el momento de jugar la gran final. La «Azulgrana» va por obtener un título que se le hace esquivo desde el año 1970 (1969), siendo esa la segunda, luego de haberla logrado por primera vez en 1953 (1952).
Muchas especulaciones si la selección jugaba o no la actual Copa cuando ya todos saben lo que pasó en 2016 en la Liga Departamental. Muchas interrogantes luego del debut ante San José, pero lo cierto es que los dirigidos por Parolín e Irazoqui llegaron a esta instancia y con muchas posibilidades de que el domingo cercano a las 22:00 horas se levante bien arriba el trofeo.
Dos resultados le servirán a la «Azulgrana» para adjudicarse el título, la victoria y el empate. De caer en los 90´, se pasará a la tanda de penales. Recordar que en el cotejo de ida disputado en el Estadio Goyenola una semana atrás, fue victoria para el seleccionado canario por 3 a 2 con la recordada noche de Joaquín Irazoqui.
Finales son finales y partidos son partidos, pero Canelones dejó en claro en el primer que cotejo que es más que Tacuarembó en muchos aspectos. Ha logrado una identidad en su juego, tiene gol y solvencia defensiva. Si había una mejor manera de cerrar el torneo era esta, definir la llave en casa.
Con respecto al equipo, nuevamente la dupla técnica prefirió guardarse el once inicial y darlo a conocer minutos antes del encuentro. Habrá que ver si pone mano en la oncena que ganó en el norte del país o no. Con la vuelta de Vidal, Butti, Massa y Banuchi, Parolín e Irazoqui cuentan con todo el plantel.
Las palabras quedan atrás al igual que todo lo vivido, la mira está solamente puesta en los últimos 90 minutos. Es el último escalón hacia la gloria…
Martín Abreu